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Mostrando entradas de julio, 2008

ESCRIBA CIEN VECES: AHORRAR

ESCRIBA CIEN VECES: AHORRAR Por Luis A. Sigifredo Es cierto que estamos todos atrapados por festival de acontecimientos que se llevarán a cabo en la Capital, por parlamentarios integrado por conspicuos legisladores a quienes no se les cayeron demasiadas ideas y sin llegar a dilucidar, mayoritariamente, que el pueblo está saturado de una forma de gobernar guiada por al autoritarismo y que poco a poco van socavando uno de los derechos más sagrados el de la propiedad. Esa es la cuestión y no otra. Mientras tanto nuestro gobierno provincial está por llevar a cabo, no sin antes pasar por el partidariamente disciplinado congreso provincial, un fenomenal golpe fiscal e impuestazo número ¿? Escudado en un gobierno nacional que le retacea recursos para financiar el fenomenal gasto público provincial que supo generar nuestro ilustre ex-gobernador. Algunos de mis lectores, de está poco intelectual columna de opinión, me habrán oído predecir el final de este carnaval del gasto público y creo que e

CARTA RESPETUOSA DE UN CIUDADANO

Carta enviada a los Senadores de la Nación, por medio de mails, intentando hacer escuchar la voz ciudadana, actitud que los invito a imitar en la convicción que somos los únicos capaces de vencer a la soberbia y el autoritarismo. Estimado Senador/a: En mi condición de ciudadano, ante todo tengo la obligación de contarle que no tengo tierras, solo algún poco en las macetas y en las orejas, que me estoy recuperando de un ACV, debido a lo cual estoy parcialmente discapacitado, tengo 52 años y obviamente no tengo trabajo, todo lo dicho creo que lo convencerá que mi interés económico directo en el tema es: cero. El problema en el interior es muy grave. En la zona en la que vivo, Noetinger-Córdoba, los pequeños y hasta muchos medianos chacareros se han visto obligados ha arrendar sus tierras para evitar ser deglutidos por los costos fijos, única alternativa que les permite mantener la propiedad, la que en un alto porcentaje es herencia de dos o tres generaciones, no de la timba financiera o